jueves, 20 de octubre de 2011

Break the shell & eat it!

¿Cuáles son los detonantes en la vida? Eso que te impulsa a tomar riesgos, a comprometerte un poco más, a cruzar la línea. ¿En que lugar mas bien se dibuja ese límite que nos revuelve la moral? Una frontera que aún siendo virtual significa muchas veces desacatar leyes, ignorar conceptos, ir en contra de todo, hasta de lo que creíamos ser de uno mismo. Que tan humanos somos para conocer bien los límites de cada uno, o aquellos impuestos por una sociedad ancestral que viene evolucionando con los años. O mas bien la pregunta podría ser distinta… ¿Qué tan inhumanos somos para asumir algunos riesgos que nos aíslan del concepto benéfico y honrado del ¨ser humano¨? ¿Que tan carnales podemos llegar a ser? o que tan grande es la ambición en un momento dado, que nos ofusca la mente de manera tal, que nos olvidamos del resto aunque sea por un instante, porque a veces ese instante es lo único que hay.

Pongamos por ejemplo el dinero. Yo que hablo siempre de humildad, amor y perdón, no puedo negar que también gusto de él. Sería engañoso decir que no disfruto de las cosas buenas, aquellas que lastimosamente solo el dinero puede comprar. Claro que hay un límite, siempre lo hay. Sobretodo para aquellas personas que han aprendido a vivir de una manera racional. Que han aprendido a dominar de manera eficiente el intelecto, y se alejan de los extremos antes de llegar al abismo, incluso mucho antes. Sin embargo hay otras que no. Que les gusta vivir en los extremos. Que únicamente funcionan allí, bajo la presión, bajo la incertidumbre del próximo paso. Como una ruleta que no deja de dar vueltas mientras se mueven las fichas de aquí para allá, y de regreso. Apostándole al todo con decisiones frágiles, quizás erróneas, impulsivas mas bien. Un estado de emoción continuo que despierta los sentidos, y le da más sabor a la vida. Simplemente una manera distinta de vivir.

Siempre hay dos tipos de riesgos aunque ambos despierten de manera similar el sistema simpático nervioso. Aunque ambos disparen una dosis de adrenalina que produzca los mismos efectos, que aumente los latidos del corazón, que dilate la pupila, que disminuya los jugos gástricos del estomago. Sin embargo uno se escoge adrede, y el otro se asume cuando ya no hay más remedio. Con el dinero entonces… algo material por lo cual es tan fácil desdoblarse y perder la razón: un dulce tan adictivo y tan sabroso que todos queremos tener, al menos probar, y probablemente volver a tenerlo dando vueltas en la boca. Mil veces. Hasta vernos involucrados en actividades que nos colocan cercanos a la muerte tan solo por conseguirlo.

¿Qué se piensa en el momento de tomar un gran riesgo? en este caso por dinero. Mas aun cuando hay probabilidad de correr peligro, ¿acaso se piensa en lo peor? o seguimos siento optimistas en estos casos cuando hay probabilidades de que algo suceda mal. Si relacionamos muerte con la toma de riesgos en algunos casos, podemos irnos atrás y citar estadísticas que comprueban que la muerte esta en todas partes, no solo a la hora de rozar un extremo con la punta de los dedos. Diferentes dosis de ella según donde se esté (1/83 de morir en un accidente de carro, 1/5,000 en uno de avión… asesinato? 1 de 210 a lo largo de toda tu vida). El riesgo de morir existe desde el momento en que nacemos. Si no lo tuviéramos tan presente dia a dia,  quizás tomaríamos más riesgos personales por cosas como el dinero, la libertad o el amor, o irónicamente nos sentiríamos más vivos aunque algunos de ellos asomaran la probabilidad de morir. Quizás el dinero no fuese tan importante al creernos inmortales, o quizás lo quisiéramos más por el hecho de vivir para toda la vida. Que cantidad de dinero tendría que haber sobre la mesa para aceptar un reto que involucrara 1% de la posibilidad de morir? y si la suma se triplicase pero consecuentemente el chance de morir aumentase hasta un 50%... ¿se tomaría? Un sin numero de factores externos podrían influenciar una decisión como esta para algunas personas, yo diría que para la mayoría, sin embargo hay otras para las cuales la toma de riesgos es la única manera de sentirse vivo, de actuar, y muchas veces de ganar, aunque exista una probabilidad por más remota que sea, de perderlo todo en el intento.


The torment of precautions often exceeds the dangers to be avoided.  It is sometimes better to abandon one's self to destiny.  ~Napoleon Bonaparte


1 comentario:

  1. No one wants to die, even people who want to go to Heaven don't want to die to get there, and yet, death is the destination we all share. No one has ever escaped it. And that is as it should be, because death is very likely the single best invention of life. It's life's change agent; it clears out the old to make way for the new. right now, the new is you. But someday, not too long from now, you will gradually become the old and be cleared away. Sorry to be so dramatic, but it's quite true. Your time is limited, so don't waste it living someone else's life. Don't be trapped by dogma, which is living with the results of other people's thinking. Don't let the noise of others' opinions drown out your own inner voice, heart and intuition. They somehow already know what you truly want to become. Everything else is secondary. -Steve Jobs

    PS: Felcidades por el libro y mucho exito!

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